Warren Edward Johnson (Blue Sky)
- " Pasaron otoños, primaveras, inviernos.
- A veces llovía y el viento aplastaba las gotas de lluvia contra los cristales del autobús, difuminando el paisaje urbano.
- Entonces, él imaginaba que el autobús era la casa de los dos.
- Había hecho unas divisiones imaginarias para colocar la cocina, el dormitorio de ellos, el cuarto de baño.
- E imaginaba una vida feliz: ellos vivían en el autobús, que no paraba de dar vueltas alrededor de la ciudad, y la lluvia o la niebla los protegía de las miradas de los de afuera. No había navidades, ni veranos, ni semanas santas.
- Todo el tiempo llovía y ellos viajaban solos, eternamente, sin hablarse, sin saber nada de sí mismos. Abrazados. "
- Juan José Millás ( su página web)
- El paraíso era un autobús (fragmento)
14 comentarios:
Que buen gusto tienes... encantador post.
Saludos!
Qué grande Millás.
A veces uno daría vueltas sin parar en un autobús urbano.
me gustó mucho el cuadro de dionisio blanco. me recuerda a milton avery, uno de mis pintores favoritos
Hermoso me gusta el poema como las pinturas están lindas...
gracias por compartirlas...
un abrazo fraterno
Un autobús, un banco del parque, dos sillones frente a frente, el quicio de una puerta... en cualquier lugar donde las puntas de los dedos puedan atrapar la caricia que dejas en el aire o el suspiro que el aliento arroja.
Millás, me gusta y me consuela, igual que tus entradas, impagables, balsámicas, de fresa y menta o chocolate y miel, como prefieran ustedes; pero imprescindibles siempre.
Un beso guapa
Maravilloso cuento de Millás, ya lo creo (una vez más coincidimos, Carmen, a mí me encanta Millás -tienes un enlace a su pág en mi blog, ¿lo has visto?)
Bien mirado puede ser divertido vivir en un autobús; si se piensa es lo de afuera lo que va cambiando mientras el "interior" se mantiene . No es mala forma de vivir, en absoluto. De hecho ellos dos forman una especie de mundo aparte dentro del autobús móvil y las gentes que suben y bajan
Un beso
Trenes y autobuses son dos medios de comunicación no sólo para desplazarse, sino en los que vivir historias curiosas. Una vez más una acertadísima combinación de arte y literatura.
Abrazos de año nuevo!!
Hola Carmen! , he estado un poco perdido, pero aquí estoy , como siempre muy buena combinación de imágenes y escritura!!!!
Te deseo un Feliz 2009!!!!
He vivido una de las historias más eróticas de mi vida en un autobús. Fue entre Medang y el lago Toba (Prapat) en Sumatra. Ella era italiana. Nos acabábamos de conocer en el barco. En diez horas nocturnas que duró el trayecto en un autobús lleno hasta la bandera de indonesios, nos acariciamos, nos juntamos, nos apretamos en una noche que en mi memoria se hace eterna, aunque ella ya esté olvidada. En un autobús se pueden vivir muchas historias...
Ojalá tengas muchos autobuses en el año que se avecina. Y que llueva todo lo que tenga que llover.
Un beso, Carmen.
Hola, me encantaron tus dos blogs!! también me daré el tiempo de leerlos, saludos!!
Esos cristales que simulan escaparates de lo ajeno.
Visión que si se comparte nace con complicidad.
Besos y feliz año!
Muchos abrazos para ti, y gracias por hacerme compañia, aún en los silencios. Hoy comparto contigo algo que me ha ocurrido por la tarde muy singular (para mi) está en el otro blog, el de fotografía, te dejo el enlace al perfil por si te apetece verlo:
Suerte, suerte, suerte… mucha suerte con las uvas que encontré esta tarde en la playa, si, sincronicidad…
Un abrazo y besos
Haideé, ¿Dónde está el enlace? no lo veo, me gustaría visitar tu blog, sois tantos y tan buenos que no doy más de mí misma, pero poquito a poco...
Seguro que el enlace está aquí al lado, pero no sé cual es
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